En un esfuerzo por lidiar con el creciente uso de inteligencia artificial (IA) en las campañas políticas, veinte estados en los Estados Unidos han implementado normativas que exigen a los anuncios revelar si han utilizado IA generativa. Este movimiento busca mitigar la propagación de desinformación en las próximas elecciones de noviembre. Sin embargo, un reciente estudio del Centro de Política Tecnológica de la Universidad de Nueva York, reportado por el Washington Post, revela una reacción negativa por parte de los votantes hacia estos anuncios que llevan la marca de IA.
El estudio, realizado con la participación de mil individuos, evaluaba la respuesta de los participantes ante anuncios políticos de candidatos ficticios. Los resultados mostraron que aquellos anuncios que incluían un aviso de que habían sido modificados con IA eran percibidos como menos confiables y atractivos. De hecho, los participantes se mostraron más dispuestos a reportar dichos anuncios en redes sociales. Además, en el caso de los anuncios de ataque, las opiniones hacia el candidato que promovía el ataque empeoraban, y las opiniones negativas no diferenciaban entre partidos políticos.
Los investigadores probaron dos tipos de avisos. Uno inspirado en las leyes de Michigan, que declaraba: “Este video ha sido manipulado mediante técnicas técnicas y presenta discursos o comportamientos que no tuvieron lugar”. El otro, basado en la ley de Florida, indicaba: “Este video fue creado en su totalidad o en parte con el uso de inteligencia artificial generativa”. A pesar de que los requisitos de Michigan son más comunes, los participantes mostraron preferencia por el segundo, menos detallado.
A pesar de estos esfuerzos por alcanzar una mayor transparencia, el estudio descubrió que un significativo 37 por ciento de los encuestados no recordaron haber visto ningún aviso sobre IA tras observar los anuncios. Este dato pone en relieve que, aunque las advertencias pueden ser un paso hacia la claridad en el uso de IA, todavía existen retos para asegurar que la información llegue eficazmente a los votantes.
En conclusión, aunque la implementación de avisos sobre el uso de IA en anuncios políticos es un paso hacia la transparencia electoral, el estudio subraya la necesidad de seguir refinando estas estrategias para compensar las posibles manipulaciones y mantener la confianza del electorado.