Las mega-constelaciones de satélites de baja órbita terrestre (LEO) han revolucionado las comunicaciones satelitales tradicionales, permitiendo servicios de banda ancha en áreas remotas y poco atendidas. Empresas como SpaceX, Eutelsat y Amazon han encabezado estas iniciativas con proyectos como Starlink, OneWeb y Kuiper. En 2024, las comunicaciones Direct Satellite-to-Device (DS2D) comenzaron a ser probadas a gran escala, permitiendo a los teléfonos inteligentes conectarse directamente con estaciones base en órbita.
Este estudio ha realizado un análisis basado en datos recopilados entre octubre de 2024 y abril de 2025, evaluando las capacidades y limitaciones de los servicios DS2D usando el servicio de cobertura suplementaria desde el espacio (SCS) de Starlink, líder en esta área. Las pruebas revelaron una fuerte correlación entre el número de satélites desplegados y la disponibilidad del servicio en áreas de baja cobertura terrestre, como parques nacionales y zonas rurales de baja densidad poblacional en Estados Unidos.
Los datos recolectados muestran que el poder de recepción de la señal recibida (RSRP) de DS2D es marcadamente inferior al de las redes terrestres, debido a las mayores distancias de transmisión. No obstante, la calidad de la señal recibida (RSRQ) es mejor en escenarios de baja carga gracias a la mínima interferencia y restricción en el uso de servicios como SMS. Mientras tanto, la relación señal-interferencia más ruido (SINR) indicó que el desempeño de las comunicaciones DS2D se encuentra limitado principalmente por la cobertura.
El rendimiento estimado del servicio de datos móvil DS2D actual se proyecta en alrededor de 4 Mbps por haz en condiciones exteriores, resultado suficiente para proporcionar una conectividad básica, pero aún inferior a las velocidades promedio de descarga terrestre. Se espera que evoluciones futuras en la regulación espectral y el despliegue de constelaciones puedan elevar sustancialmente esta capacidad.
A largo plazo, la adición de más satélites podría mejorar considerablemente la capacidad y alcance del servicio DS2D, maximizando su potencial en la ampliación de cobertura donde la infraestructura terrestre es deficiente o inexistente. Así, el servicio DS2D presenta una solución prometedora y en constante evolución para la expansión de la conectividad global.